Esto significa que oficialmente el formato MP3 ha sido abandonado, y aunque se seguirá usando mucho tiempo a nivel de usuario, ya no van a aparecer en el mercado nuevos reproductores o nuevo software con licencia para usar el formato MP3.
El propio Instituto Fraunhofer IIS justifica esta decisión argumentando que los nuevos formatos que existen en la actualidad, como ACC o el futuro MPEG-H, a los que apoyará a partir de este momento, son más eficaces a la hora de comprimir audio sin pérdida de calidad.